La directora marroquí Maryam Touzani ya nos impresionó en 2019 con la delicadeza con que trató el tema de una madre soltera en Adam. En 2022 se adentra con El caftán azul en una historia de temática no menos delicada, la de la homosexualidad en las sociedades islámicas. Lo hace tejiendo una trama poco convencional que habla del ocultamiento externo de las tendencias sexuales pero también de que el amor tiene otras muchas vertientes. Hay en este caso una especial ternura en la mirada de Touzani al acercarse a su sufriente protagonista, la misma actriz de Adam, Lubna Azabal, ganadora del premio a mejor actriz en la Seminci de Valladolid.
Lubna Azabal es Mina, esposa de un hombre al que ama enormemente y con quien ha compartido muchos años de su vida, tanto en su piso familiar como en el trabajo en la tienda. Un hombre que vive una mentira, con una máscara que se quita de vez en cuando en sus visitas al Hamam.
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